Twitter siempre ha sido más que una red social. Es un gigante en el mundo de la comunicación, un punto de encuentro para conversaciones globales, noticias de última hora y expresiones culturales.
Las empresas han aprovechado su alcance para amplificar sus marcas, y l_s usuari_s la utilizan para conectarse, informarse e influir.
Hoy en día, decir “lo vi en Twitter”, es como decir “lo escuché en las noticias”.
Nacido de la mente de Jack Dorsey en 2006, Twitter fue concebido inicialmente como un servicio de mensajería para comunicarse en grupos pequeños.
Sin embargo, su verdadero potencial se materializó al presentarse como una plataforma de microblogging con un límite inicial de 140 caracteres, que posteriormente se expandió a 280.
Twitter desafió a sus usuari_s a comunicar sus pensamientos, noticias y chismes de una manera concisa y creativa, cambiando la forma en que consumimos información en el proceso.
Hoy analizamos la Marca Twitter, aunque ahora se llame X.
Líder en noticias.
En muchas ocasiones, antes de que las cadenas de noticias nos contaran sus novedades, Twitter ya estaba allí, narrando eventos en tiempo real, a través de sus usuari_s.
En muchas ocasiones ha sido la primera página no oficial del mundo, donde las historias salen a la luz y se expanden al resto de plataformas y canales.
Cuando las llamas abrazaron la histórica Catedral de Notre-Dame, las imágenes y videos del incendio aparecieron en Twitter mucho antes que en las transmisiones de noticias en vivo. El mundo entero vió, casi en tiempo real, cómo uno de los monumentos más icónicos de Europa estaba en peligro.
Así también, lo que comenzó como un evento que sugería, en tono de broma, invadir el Área 51, se convirtió en un fenómeno viral en Twitter.
A medida que la fecha de la supuesta invasión se acercaba, Twitter se llenó de memes, discusiones y actualizaciones. Finalmente, el evento culminó en una reunión pacífica, pero demostró el poder de Twitter para movilizar a las masas.
Incubadora de memes.
La red social del pajarito también ha sido el hogar de memes y tendencias que capturaron nuestros corazones y nos sacaron unas cuantas risas.
La cultura del meme nace y florece en Twitter, uniendo a personas de diferentes culturas en movimientos globales.
#Chimuelo.
Un niño chileno y su intento fallido de despedir a su pájaro se convirtieron en un fenómeno cómico, con muchas interacciones a nivel mundial.
#NiUnaMenos.
El hashtag que empezó en Argentina, se convirtió en un símbolo de la lucha contra la violencia de género, llevando a protestas masivas en América Latina y el mundo.
Altavoz global.
Esta red social es también una plataforma que ha empoderado a comunidades y movimientos para alzar la voz en contra de las injusticias que nos rodean.
Algunos de los movimientos políticos, sociales y culturales de nuestros tiempos han ganado apoyo mundial gracias a la difusión de la opinión pública mediante Twitter.
Ejemplos de esto son la famosa Primavera Árabe, donde Twitter fue fundamental para organizar y difundir las protestas que cambiaron el panorama político de Medio Oriente. Y movimientos que exigieron justicia y cambio social a través de hashtags como #MeToo y #BlackLivesMatter.
Todo tiene su lado B.
Si bien Twitter ha sido una fuerza positiva en muchos aspectos, también ha promovido la cultura de hate y la cancelación.
El hate se refiere a intensos ataques a personas o ideas. Estas agresiones pueden ser desde críticas y comentarios despectivos hasta acoso o amenazas, incluso de muerte.
Junto con el hate, en Twitter también nace la cultura de cancelación.
En cualquier sociedad, cuando alguien dice o hace algo que rompe con las normas preestablecidas, es normal que tenga consecuencias en su reputación, vida personal o trabajo.
Sin embargo, aunque esto no es nuevo, Twitter parece haberlo potenciado. Cancelar a alguien implica un boicot social digital, donde se invita a la comunidad a dejar de apoyar o seguir a una persona.
Hoy, una persona puede ser #cancelada por decir algo inadecuado para otro grupo de personas. Siempre habrá alguien a quien le moleste lo que digas o hagas, pero en una sociedad desarrollada, la tolerancia por la opinión ajena tenía un margen mayor de aceptación a las opiniones diferentes.
Aunque la intención detrás de la cancelación a menudo es llamar la atención sobre comportamientos problemáticos, también ha llevado a debates acerca de hasta dónde se extiende la libertad de expresión.
Algunos ejemplos de esto son la cancelación por parte de la administración de Twitter a Donald Trump, después del asalto al Capitolio en enero de 2021, para evitar el riesgo de una mayor incitación a la violencia. Y por parte de l_s usuari_s, la cancelación a Bad Bunny, cuando a principios de este año lanzó el teléfono de una fan que le estaba haciendo fotos por la calle sin su consentimiento.
Revolucionando la relación marca-consumidor.
Twitter no solo cambió la forma en que consumimos y generamos noticias, sino también cómo nos comunicamos en general.
Las marcas ya no solo hablan a sus consumidor_s, sino que dialogan con ell_s.
Con la creación del hashtag, las conversaciones se volvieron más organizadas y accesibles. Las noticias ya no esperan al ciclo de 24 horas, ahora son instantáneas.
Y no solo eso, las marcas ahora tienen la capacidad de responder en tiempo real, adaptando sus estrategias de marketing a las tendencias actuales y obteniendo feedback instantáneo.
Estas han tenido que evolucionar a ser culturalmente relevantes y participar en eventos sociales que captan la atención de sus consumidor_s.
Twitter ha eliminado las separación entre empresas y consumidor_s, creando un diálogo bidireccional, en el que las marcas se presentan como un usuario más.
De Twitter a X.
En Octubre de 2022, Elon Musk, conocido por sus emprendimientos en tecnología y espacio, y twitteador por excelencia, decide comprar la plataforma.
A partir de este momento, se dan muchísimos cambios, siendo el más reciente la transformación de Twitter a X.
Este rebranding significó un hito en la historia de la marca, y en el universo digital en general. Esta metamorfosis no solo implica un cambio en su nombre, logo y colores, sino una redefinición de su identidad y propósito de “super app”.
En julio 22, Elon publicó una encuesta en la plataforma, y por votación, se decidió cambiar la paleta de colores. A partir de este momento se pasó del azul característico a negro.
Al día siguiente, la nueva marca y el nuevo logo fueron oficialmente anunciados.
La marca X reemplazó repentinamente a la marca Twitter y a su mega conocido pájaro azul. El dominio x.com redirige a twitter.com. Y ahora los Tweets se llaman X´s.
En tan solo un día, Elon orquestó un rebranding monumental que dejó como resultado, además de los memes y críticas, una enorme confusión entre l_s usuari_s de la plataforma.
La razón por la que Musk eligió la letra X todavía es un misterio. Se cree que se debe a su obsesión por esta letra: Modelo X de Tesla, su centro de exploración espacial SpaceX o incluso al nombre de su hijo X Æ A-XII que a menudo llaman solo X.
Podemos pensar que la exTwitter buscará involucrarse más con tecnologías emergentes y posiblemente expandirse a nuevas áreas inesperadas. Como dejar de ser una plataforma de microblogging para incursionar en la industria de las finanzas o la inteligencia artificial.
De cualquier manera, el cambio de Twitter a X ha marcado el inicio de un nuevo capítulo en las redes sociales.
X ahora es el futuro de lo que alguna vez fue Twitter, y solo una cosa es segura, va a continuar transformando cómo nos comunicamos. Y nosotr_s estaremos tuiteando, o x-eando al respecto.
